Cómo encontrar el espacio de coworking perfecto
Si estás buscando un entorno cómodo, tranquilo y, sobre todo, colaborativo, entonces estás buscando desde luego un espacio de coworking.
Un concepto reciente ideal para aquellas personas que buscan trabajar en remoto, de forma independiente y que prefieren alternativas más flexibles y colaborativas a las oficinas tradicionales.
En resumidas cuentas así es cómo podríamos definir un espacio de coworking al uso. Aunque, como todo en esta vida, las características pueden variar mucho entre uno y otro.
¿Cómo asegurarte entonces de que das con el espacio de coworking perfecto? Hagamos un repaso a los aspectos imprescindibles que has de tener en cuenta:
Qué tiene que tener un espacio de coworking
- Confortable: principalmente has de buscar un espacio que te haga sentir cómodo e inspirado para desempeñar la jornada laboral. Debe contar con diferentes servicios como cocina, escritorios bien distribuidos, sala de reuniones, agua, luz, enchufes, etc. a fin de que no te falte de nada durante tus horas de trabajo.
- Ubicación: no sólo debes buscar un lugar confortable en cuanto a infraestructura, la ubicación es estratégica. Este espacio debe situarse alrededor de restaurantes y diferentes establecimientos para cubrir cualquier necesidad sin que tome mucho tiempo.
- Buena conexión a internet: a día de hoy, ¿Quién no necesita internet a la hora de trabajar? Contar con una buena conexión tanto de subida como de bajada es vital si no quieres ver cómo tu trabajo se ve interrumpido constantemente.
- Económico: los gastos derivados del alquiler, servicios y equipos se dividen entre los miembros, lo que resulta en un coste total más bajo en comparación con tener una oficina propia.
- Zonas comunes: estos espacios son necesarios no solo para contar con algún momento de relajación de cuando en cuando, sino también para realizar networking y establecer colaboraciones con otras personas y empresas presentes en el espacio de coworking.
Coworking para todos
¿Quién puede disfrutar de los espacios de coworking? Respuesta corta: todo el mundo. Ahora bien, hay perfiles que pueden sacar más partido a este tipo de entornos (aunque por supuesto pueden variar en función de la tipología y características de cada espacio).
Aquellos profesionales con trabajos y horarios más flexibles (como son autónomos o nómadas digitales) son los perfiles que más suelen asociarse a los espacios de coworking.
La combinación de estos perfiles en un mismo entorno puede ser muy enriquecedora y motivadora para todas las partes, ya que al pertenecer a diferentes nichos y no guardar relación laboral entre sí, pueden surgir ideas y proyectos nuevos.
Por otro lado, también tendríamos a las pymes. Tal y como veíamos en el anterior punto, el trabajar en un espacio de coworking suele suponer una reducción de los costes operativos, al mismo tiempo que permite interactuar con otras empresas del mismo sector (o incluso de otros ámbitos).
Sea uno u otro caso, aprovechar las oportunidades del coworking te puede ayudar a expandir tu red personal y laboral con la que nutrir tus próximos proyectos. Han trascendido su función original para convertirse en ecosistemas laborales versátiles que impulsan la innovación, fomentan la colaboración y abren las puertas a nuevas oportunidades profesionales.
Estos espacios se pueden alquilar a corto o largo plazo, en función de tus necesidades. Si tienes la suerte de trabajar de manera remota, puedes aprovechar a viajar, pero al mismo tiempo necesitas de un espacio profesional y con ambiente de trabajo multisectorial, entonces los espacios de coworking se ajustan a tu perfil.
Otra alternativa es que trabajes parcialmente presencial y remoto. De este modo, si sientes la necesidad de estar en una oficina rodeado de un ambiente profesional que te haga mantenerte motivado y disciplinado durante los días de teletrabajo, esta también es una excelente opción.
¿Qué diferencia tienen el espacio de coworking y la oficina convencional?
Imaginamos que te habrás preguntado también qué tienen de especial estos espacios en comparación con una oficina normativa o un centro de negocios. La verdad es que es una pregunta de lo más lógica. Veamos sus principales diferencias:
El centro de negocios u oficina es el espacio de una empresa concreta. Estás rodeado de compañeros de tu trabajo ya que la planta es de tu empresa, con lo que es una ambiente rutinario. No quiere decir que sea peor (no empleamos la palabra “rutinario” con una finalidad peyorativa), simplemente que es un ambiente donde se da una mayor rutina.
Sin embargo, este nuevo concepto de coworking, innova la “típica” oficina, pudiendo juntar a personas de diferentes empresas, trabajos y nichos, dando lugar a espacios más polivalentes, flexibles y cambiantes.
Hay trabajos que son 100% remotos que no constan de una oficina fija, pero que sus trabajadores pueden optar por tenerla para no usar su vivienda como oficina para trabajar diariamente. Es un buen método para optimizar el trabajo también, ya que de esta forma se combate la falta de disciplina o la improductividad (aunque, como ya vimos, teletrabajo y falta de productividad no tienen por qué estar relacionadas).
Si hasta ahora no te habías planteado trabajar en un espacio de este tipo, es el momento de que te acerques a probarlo. Puede ser muy positivo en tu jornada laboral. Estos lugares han evolucionado más allá de simples oficinas compartidas para convertirse en auténticas comunidades de profesionales diversos y apasionados.
Incluso empresas consolidadas están adoptando esta tendencia, reconociendo que los espacios de coworking pueden impulsar la productividad de sus empleados y brindarles la oportunidad de establecer contacto con otros líderes de la industria.
Si estás buscando un lugar donde puedas prosperar profesionalmente, establecer conexiones significativas y trabajar en un entorno inspirador, un espacio de coworking podría ser la elección perfecta para ti.